El cuerpo grita lo que callas, si tú no expresas tus necesidades, el cuerpo acabará haciéndolo por ti.

¿Cómo? Empezará lentamente mostrándote algún síntoma, y si lo ignoras, acabará gritándote y se manifestará entonces la enfermedad.

Si no quieres enfermar, tienes que empezar a escuchar los mensajes que te manda tu cuerpo; ya va siendo hora de que pares, que lo escuches, que le dediques tiempo … y de ésta manera no enfermarás.

Cuando enfermas, te encuentras en desequilibrio, y es precisamente el síntoma quien te avisa de éste desequilibrio que no hay ni que ignorar ni mucho menos tapar (caso habitual hoy en día por la gran mayoría de la población), ¿qué debes hacer entonces? Prestar atención.

Es importante que te preguntes QUÉ te impide hacer para que puedas sanar.

Si has leído hasta aquí es porque te identificas con lo que lees, y quieres saber más, así que te invito a que cambies ciertas pautas y hábitos para que puedas vivir más y mejor.

 

¿Empezamos?

  • Habla de tus sentimientos: todo aquello que callas, reprimes… acaba manifestándose en forma de enfermedad como: dolores lumbares, úlceras … se trata de empezar a expresarte con sinceridad utilizando la asertividad, ya que la palabra es una excelente terapia.
  • Toma decisiones: no puedes estar dudando continuamente, con ansiedad… debes aprender a renunciar, a dejar ir, a valorar los pros y los contras, a saber que unas veces se gana, otras se pierde, ¡¡¡pero siempre se aprende!!!
  • Busca soluciones: las personas negativas no ven soluciones sino aumentan los problemas, pero quiero que sepas que el pensamiento negativo genera energía negativa que se transforma en enfermedad así que somos lo que pensamos, ten esto presente.
  • NO a las máscaras: quien esconde la realidad, quiere dar una impresión de estar bien y lo que hace es ir cargando la mochila de piedras pesadas que no van a ninguna parte, por lo tanto: ACEPTATE. Debes quererte, mimarte, no rechazarte … ser uno mismo es la base de una vida y autoestima saludable.
  • Confía: sin confianza no puedes relacionarte con los demás, no te abres, no te comunicas, no haces amistades verdaderas y te garantizo por experiencia propia que te pierdes muchos momentos buenos de la vida.
  • Practica el buen humor: sí, sí, como bien has leído … El buen humor puede practicarse.

¿Has escuchado que después de la tormenta sale el sol? Pues ríe, contagia buen humor allí donde vayas. Hay médicos que dicen que el buen humor nos salva de las manos del doctor, así que ya sabes … ¡a practicar!

El arte de no enfermar parece sencillo y difícil a la vez. Pasa por sentir, aceptarse, confiar, tener las riendas de tu vida y ser feliz.

Pero es necesario que practiques poco a poco, tómate unos minutos al día para meditar, para conectar con tu esencia y observar qué señal te envía tu cuerpo como síntoma para que actúes y pongas remedio rápido. Si necesitas ayuda, estoy aquí para lo que necesites.

 

 

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