En anteriores posts que he escrito ya he explicado qué es el Reiki, cómo es una sesión de Reiki y cómo controlar tu nivel de ansiedad con Reiki; ahora voy a centrarme un poquito más en sus beneficios, los que he ido comprobando yo misma con mis pacientes a lo largo del seguimiento de sus terapias.

También creo útil comentaros que se ha ido introduciendo poco a poco en hospitales como el Ramón y Cajal y el Doce de Octubre en Madrid para tratar a enfermos oncológicos, ya que se ha comprobado que las defensas del paciente suben empleando el Reiki tras un tratamiento con quimioterapia. Hay otros hospitales como el Hospital Clínic en Barcelona, que a través de sus voluntarios de Reiki canalizan energía a aquellos pacientes que quieran recibirla.

También es útil en enfermos terminales, ya que les ayuda a aceptar el tránsito que están a punto de emprender, proporcionándoles paz y tranquilidad.

Actuación del Reiki

El Reiki actúa en los niveles: físico, mental y emocional; dependiendo de las necesidades de cada persona, el proceso de sanación será de una o de otra manera.

  • Sensaciones físicas: normalmente los pacientes sienten calor, cosquilleos, como una especie de corriente a veces por todo el cuerpo. En ocasiones, frío, pero la sensación que se experimenta con más frecuencia es una relajación profunda.
  • Sensaciones emocionales y mentales: pueden aflorar en la mente imágenes, situaciones desagradables que hayan podido ocurrir en el pasado y que estaban “enterradas” en la memoria con el fin de evitar el dolor… Después del tratamiento, ya no parecen tan horribles, se ven con otros ojos y surge la liberación. Puede que también sueñes más.

Síntomas

Ocasionalmente, tus síntomas pueden empeorar después de una sesión, pero es buena señal (aunque te parezca lo contrario), ya que significa que estás liberando la energía que causaba tu malestar y por eso los síntomas se manifiestan.

Pero tras el empeoramiento, notas mejoría en tu estado general y te sientes mucho mejor.

¿Cuáles son sus beneficios?

  • Sensación de paz y tranquilidad.
  • Aumento de energía y ánimo, eleva tu autoestima.
  • Armoniza cuerpo, mente y alma.
  • Ayuda a modificar actitudes y comportamientos.
  • Equilibra los chakras (centros energéticos del cuerpo humano).

No es necesario creer que funciona, pero sí es importante que el paciente tenga el deseo de estar bien.

Reiki te da las herramientas para que soluciones los problemas que tengas. El proceso de sanación lo haces tú, liberándote de tus miedos, recibiendo esta energía y utilizándola para tu sanación.

Ahora, te invito a que respondas con sinceridad a la siguiente pregunta: ¿Realmente quieres estar bien y ser feliz, aunque esto implique un giro radical en tu vida?

Si la respuesta es Sí… Reiki te ayudará.

Si quieres iniciar tu terapia, rellena el formulario con tus datos que encuentras a continuación y me pongo en contacto contigo. Estaré encantada de poder ayudarte en este camino de crecimiento personal.

Pin It on Pinterest