Cada vez más vienen a consulta niños y niñas derivados por la tutora del colegio para que les realice pruebas y establezca diagnósticos de TDAH, Dislexia …
Vamos a ir despacito, no me gusta etiquetar de entrada y en las primeras sesiones establezco mucha comunicación con el niño/a a través del juego, y valoro si son necesarias las pruebas o simplemente mejorando algunas conductas y estableciendo ciertas pautas se nota mejoría en la problemática consultada.
La terapia es útil para que los niños desarrollen habilidades para resolver problemas y también para enseñarles el valor de buscar ayuda.
Los psicólogos podemos ayudarlos a ellos y a sus familias a manejar el estrés y otros temas relacionados con las emociones y el comportamiento.
¿Cómo puedo ayudarlo?
Actualmente, hay muchos niños que necesitan ayuda para manejar el estrés que les genera el colegio, por ejemplo: realización de deberes, estudiar para los exámenes, presión de los compañeros, si sufren acoso escolar…
Otros niños necesitan ayuda para poder hablar de sus sentimientos respecto a temas relacionados con la familia, sobre todo en el caso de transiciones importantes, como puede ser la separación de los padres, un traslado, un duelo de una persona querida…
Aunque los adultos sepamos manejar estas situaciones, debemos entender que para ellos se les hace un mundo, y les puede causar un estrés que podría dar lugar a problemas de comportamiento, del estado de ánimo, problemas con el sueño, empeoramiento del rendimiento académico en el colegio y un largo etc…
Tenemos que tener en cuenta que algunas veces no es tan fácil saber qué es lo que les puede estar causando que de repente se muestren preocupados, malhumorados, tristes…
Si sientes que tu hijo puede tener algún problema emocional, de comportamiento o necesita ayuda para enfrentar un acontecimiento difícil de la vida, confía en tu instinto y actúa antes de que sea demasiado tarde.
Algunas señales que no debemos pasar por alto son:
- Retraso en el desarrollo del habla y del lenguaje.
- Problemas de aprendizaje o de atención.
- Problemas de comportamiento.
- Bajo rendimiento académico (si solía sacar buenas notas).
- Cambios en el estado de ánimo.
- Aislamiento.
- Alteraciones en el sueño (insomnio o somnolencia).
- Si presenta menor interés por actividades que le gustaban.
- Si es víctima del acoso escolar, o si acosa a otros niños.
- Si desarrolla síntomas físicos como dolor de cabeza, de barriga, de malestar general… a pesar de que el médico no le encuentra ninguna enfermedad física.
Prepáralo para la primera visita
Si crees que es hora de que tu hijo visite a un psicólogo, te recomiendo que seas honesto y que le digas dónde vas a llevarlo y por qué.
Puedes explicarle que vamos a hablar, jugar y le vamos a ayudar (y también a vosotros) a resolver problemas y a sentirse mejor. Los niños suelen tranquilizarse si saben que el psicólogo va a ayudar también a sus padres, también les tranquiliza saber que todo lo que explican en terapia es confidencial y no podrá explicarse a nadie sin su permiso (siempre hay excepciones, como por ejemplo si tienen ideas relacionadas con hacerse daño a ellos mismos y/o a otros).
Darle este tipo de información antes de la primera visita le puede ayudar a que venga más tranquilo sabiendo que TODA la familia va a trabajar sobre el problema.
Si tienes más dudas o crees que ha llegado el momento que os ayude, podéis rellenar el formulario que encontráis a continuación y me pongo en contacto con vosotros.
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